
Resaltó que la mano de obra barata que llega a República Dominicana está insertada en distintas áreas de la economía, y esos trabajadores migrantes, a la vez que representan una especie de válvula de escape para su país de origen, aportan recursos a sus familiares que se quedaron en su lar nativo. “Mientras existan las desigualdades en el desarrollo económico, el fenómeno migratorio a nivel nacional, regional y mundial será una realidad”, expresó.
A su juicio, en razón de que el fenómeno migratorio haitiano hacia la República Dominicana, tiene fundamentalmente un componente humano, hay que buscarle solución humanitaria, legal, social, diplomática y política, y no precisamente la construcción de un muro.
No hay comentarios
Publicar un comentario