Responsive Ad Slot

Mafia haitianiza a dominicanos para enviarlos a Chile 6-6

martes, 18 de septiembre de 2018

/ by GVD NEWS
Raúl recuerda que Pujols fue una de cuatro personas que se le unieron en Pisiga, mientras aguardaban el momento oportuno para cruzar, corriendo, a Iquique, el 11 de noviembre de 2016.

“Cuando teníamos como media hora de camino, notamos que ella se quedó atrás y me devolví con otro compañero a buscarla. Ella se quejaba de que estaba muy cansada y la tomamos de los hombros y la llevamos hasta el punto de descanso. Emprendimos la marcha otra vez, todos, pero a los 15 minutos ya Maribel no se veía”, recuerda.

El grupo, guiado por un coyote, hacía una ruta de 3.1 kilómetros que separan a Pisiga de Colchane, en la región de Tarapacá al norte de Chile, cuya capital es Iquique. La zona es parte del desierto más seco del mundo, el de Atacama, que guarda en sus entrañas parte de las minas antipersonales sembradas por Chile en la década del 70. Cruzar tod

o el trayecto le toma al grupo alrededor de tres horas corriendo.

Raúl cuenta que con otro de sus compañeros intentó volver por Maribel, pero que el coyote los amenazó con dejarlos abandonados si lo hacían. También les prometió que se encargaría de la mujer una vez dejara el grupo en el próximo transporte.

El día 15, instalado ya en la casa de un amigo en Santiago de Chile, Raúl escuchó la noticia de que encontraron muerta a la indocumentada Maribel Pujols.

“Uno se pone nostálgico y lamentando lo sucedido... Pensé que la dejaron morir y que así como fue ella, habría sido yo, mi suegra y quién sabe cuántas personas más”, reflexiona Raúl, quien hoy también funge de testigo de una causa contra varias personas en Chile acusadas del delito de tráfico.

Su tono de voz cambia en el auricular cuando expresa que “a un enemigo mío no le deseo yo que haga ese trayecto”. “Hay que estar en ese momento para saber qué se siente y en la condición que uno se pone cruzando ese desierto de Bolivia para Chile”, concluye.

El tráfico ilegal de personas desde Dominicana o desde Haití mueve cientos de miles de dólares a lo largo de una red que involucra por lo menos seis países para apuntar al otro sueño americano del continente: Chile. Los indicios apuntan a que la mafia incluye el apoyo o la participación de funcionarios de Haití y que la justicia apenas puede hacerle cosquillas a esa red. Afuera de la Embajada haitiana en Santo Domingo, el traficante está muy tranquilo ofreciendo sus servicios: “Yo trabajo aquí en la puerta, doña; soy yo que le resuelve toda la cosa a ella”.


AVISO: Mantente en contacto con nosotros 24/7 por WhatsApp:  1717-707-7551 - (809)-819-7605 - Envíanos tus noticias y denuncias a: info@vozdominicana.org.-

No hay comentarios

Publicar un comentario

Don't Miss
© all rights reserved
made with by templateszoo