
Según los informes, las aguas también provocaron daños parciales en 16 mil 330 viviendas, devastaron mil 800 hectáreas de tierras de cultivo y varias carreteras en distritos de la provincia de Yunnan.
Se espera un aumento en las afectaciones, porque las autoridades continúan evaluando el impacto del desastre.
Un desprendimiento de tierra en el río Jinsha originó a principios de este mes el lago entre la frontera de la provincia de Sichuan y la región autónoma del Tíbet (suroeste).
El nivel de las aguas subió a niveles alarmantes y desde el inicio inundó varias fincas, edificaciones públicas y viviendas, además de afectar las vías de los poblados cercanos y obligar la evacuación de casi 40 mil ciudadanos.
Tras varios días de faena a tiempo completo, brigadas de emergencia abrieron canales y lograron el martes que fluyera el líquido.
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